Los rompecabezas favorecen la capacidad de resolver problemas, ejercitan la memoria visual, ayudan a la concentración y a trabajar la tolerancia. Un rompecabezas representa un desafío que al superarse genera gran satisfacción y eleva la autoestima.
Los rompecabezas Pipikuku permiten comenzar armando cuatro rompecabezas individuales, de cuatro piezas cada uno, y una vez que el niño esté listo para un desafío mayor se pueden juntar los cuatro rompecabezas individuales para armar el rompecabezas completo de 16 piezas. Están fabricados en madera e imán lo que permite que pueda ser armado en una mesa o sobre cualquier superficie metálica como la heladera.