Los rompecabezas favorecen la capacidad de resolver problemas, ejercitan la memoria visual, ayudan a la concentración y a trabajar la tolerancia. Un rompecabezas representa un desafío que al superarse genera gran satisfacción y eleva la autoestima.
Están fabricados en madera e imán, lo que permite que puedan ser armados en una mesa o sobre cualquier superficie metálica como la heladera.